Como habéis podido ver, en este post, vamos a decidir si enviamos a un joven, acusado de ser el asesino de su padre, a la silla eléctrica... veamos:
¿Cómo podemos ayudar al jurado? ¿Creemos que hay que enviar a la silla eléctrica al joven acusado? ¿Podemos evitar que lo hagan? ...¿Y si somos contrarios a la pena de muerte? ¿Y si creemos que la muerte es un castigo insuficiente o poco reparador ? En fin: ¿Cómo podemos ayudar a este jurado a decidir la sentencia?
La única forma que tenemos de hacerlo bien es argumentar. Una argumentación es esto que nos explican desde Chile:
La única forma que tenemos de hacerlo bien es argumentar. Una argumentación es esto que nos explican desde Chile:
En México han tomado estos apuntes sobre la argumentación y los tipos de argumentación:
Algo más desde Perú sobre la comprensión de los textos de esta modalidad:
Podrás mejorar tus propias argumentaciones con estos consejos desde España:
Ahora, ya puedes elaborar tu argumentación para el jurado de la película: ¿Crees que hay que ejecutar al reo? ¿Por qué? ¿Mejor conmutar la pena de muerte por la de prisión permanente revisable o cadena perpetua? ¿Trabajos forzados? ¿Crees tal vez que es inocente? ¿No lo crees pero tampoco estás seguro de su culpabilidad? Como ya has visto, convendría exponer tu tesis y los argumentos con claridad y coherencia.
¿Lo condenamos ya? ¿Lo salvamos? De momento, y antes de decidir, escuchemos al jurado...Oh, vaya, parece que las cosas no están tan claras como parecía...
No siempre nos gusta que las cosas no estén totalmente claras, ni escuchar las opiniones ajenas, ni respetarlas sin intentar manipularlas mediante distintas presiones, tampoco que haya discrepancia entre nuestras opiniones y las evidencias. En el peor de los casos, confundimos nuestras opiniones en verdades absolutas sin tan siquiera cuestionarlas... Sin embargo, como todos sabemos, todo ello es muy fecuente en la vida cotidiana y no sólo en los tribunales de las películas, sobre todo cuando y donde se respeta el derecho a la libre expresión de la propia opinión, como es propio de las sociedades democráticas.
...Y, como es propio de los medios de comunicación de masas, vamos a dar paso a la publicidad...
Ya vimos en clase cómo la propaganda y la publicidad son campos donde la argumentación es ubicua: aunque los anuncios no siempre empleen la modalidad argumentativa, comparten con ella la finalidad: seducir, persuadir, convencer.
... Bueno, ahora hay que ir al grano y olvidarse de esa tontería del cine: este post tenía como objetivo fundamental proprcionar vídeos educativos sobre la argumentación como modalidad textual y ya está cumplido.
Sobre la marcha he pensado que estaría bien que en clase veamos esa película (u otra de temática similar) si el tiempo nos lo permite.
En el siguiente vídeo, un joven explica cómo su falta de interés hacia el cine antiguo desapareció después de ver Doce hombres sin piedad.
Como ya sabéis y podréis comprobar, el texto contiene fragmentos propios expositivos y narrativos, pero es un texto claramente argumentativo... ¿O no? (Esto lo decidiréis en los pasillos, porque en clase no tendremos tiempo para analizarlo a fondo).
(Making off: algunos otros vídeos consultados durante la realización de este film... de este post. Aquí tampoco haremos bromas sobre sobres y ceremonias.)
La historia de la retórica en la antigüedad clásica:
Algunas reglas de la lógica y argumentación:
Un resumen sobre los textos argumentativos y su relación con el ensayo:
Un ejemplo de texto argumentativo y cómo mejorar la comprensión de esta modalidad textual:
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